Originaria de las culturas orientales, la cocción al vapor es cada vez más popular en toda Europa y especialmente en Italia. Esta técnica de cocción permite preparar platos muy sabrosos con un contenido calórico reducido, sin el uso de aceites y grasas. ¿El resultado? ¡Salud, sabor y recetas variadas!
Estos son los 5 principales
Preserva los nutrientes
Al no tener contacto directo con el agua, los nutrientes de los alimentos no se diluyen. Por lo tanto, los alimentos conservan mucho mejor su contenido de nutrientes.
Sabor rico y genuino
Los alimentos cocidos al vapor mantienen su sabor propio y genuino, lo que nos permite, en cierto modo, «redescubrir» su verdadera esencia. Este tipo de cocción es ideal especialmente para pescados y verduras.
Platos light
El método al vapor no requiere la cocción de aceite, evitando así la producción de grasas no deseadas. El resultado son platos muy ligeros, más saludables y más delicados al paladar. En el caso del pescado y el pollo, el vapor disuelve la grasa, haciendo que el alimento sea menos calórico y más fácil de digerir.
Olores casi inexistentes
En la mayoría de los casos, la cocción al vapor reduce los olores desagradables típicos de algunos alimentos. Pruébalo para creer.
Rápido y económico
La cocción al vapor es una forma rápida de preparar nuestros platos y también permite cocinar varios alimentos diferentes al mismo tiempo, ahorrando tiempo, y el lavado de ollas y sartenes.
¿Cocción al vapor? ¡También en el horno!
Quando si pensa alla cottura a vapore, si immagina normalmente il classico “castello” a più ripiani. Ma la cottura a vapore è possibile anche con appositi forni. Il forno a vapore, infatti, è capace di esaltare al massimo i sapori. Oltre ad avere tutte le funzioni di un forno tradizionale, consente di cucinare praticamente ogni cosa, dal pane alla carne, conferendo un tipico mix di gusto e croccantezza.
